Imparable la ola de robos de automóviles en la región

por Elidio Ramos Z. / El Sur / Juchitán.-

A pesar de los intensos operativos implementados por diferentes corporaciones policiacas, ha aumentado el robo de vehículos motorizados en Juchitán, como fue el caso del líder de los mototaxistas de Unión Hidalgo, Nobel López Arena, a quien le robaron su coche tipo Tsuru.
Asimismo, el domingo pasado despojaron de su unidad a un conductor del Sitio 11 de Enero, persona que fue botada por los malhechores en las inmediaciones de la colonia 25 de Mayo, mientras que los hampones salieron huyendo a bordo del taxi robado con rumbo desconocido.
Cabe mencionar que el automotor, más tarde fue hallado por otros compañeros del volante, estampado en conocido paraje, ascendiendo la reparación del vehículo a más de 15 mil pesos.
Lamentablemente, así como estos sucesos, han desaparecidos varios automóviles, y hasta el momento las autoridades no han logrado dar con el paradero de la banda que se dedica al robo de automotores.
Es importante recalcar que en Ciudad Ixtepec han desaparecido camionetas Nissan y otros tipos de carros, tanto ha sido el crecimiento de este delito que los propietarios de las unidades de motor desaparecidas ya ni ponen su denuncia, porque todo queda plasmado en un papel con unos números de investigación, o en su caso, si por cuestiones del azar las autoridades responsables logran detener a los presuntos delincuentes, estos quedan libres supuestamente por falta de pruebas.
Esto demuestra la impunidad imperante, y la ineficacia de las instancias de seguridad correspondientes, ya que en muchas ocasiones ha habido denuncias fuertes de ciudadanos que son extorsionados e intimidados de manera prepotente y agresiva, por los mismos elementos de corporaciones policiacas  que presuntamente se dedican a “reguardan la paz y seguridad públicas”, tal es el caso de ciertos policías estatales que en ocasiones han pedido “mordidas” prepotentemente a los algunos habitantes de esta ciudad en vez de combatir la delincuencia,   cayendo ellos mismos en probables delitos en contra de la ciudadanía, que espera protección y seguridad de parte de los efectivos policiacos, una muestra más de la terrible corrupción que se vive en el país, aún dentro de las dependencias de procuración de justicia que pregonan proteger a los ciudadanos.