Miles de peces amanecen muertos en Noruega sin explicación

Un perro entre arenques muertos en una playa en Kvennes en Nordreisa, en el norte de Noruega. REUTERS / Jan Petter Jorgensen / Scanpix

Los habitantes del norte de Noruega se han quedado perplejos al acercarse a la costa y encontrarse con una alfombra de arenques muertos en una playa del distrito septentrional de Nordreisa. Científicos analizarán los peces para intentar encontrar una explicación al misterioso fenómeno, aunque una de las hipótesis que se barajan es que una tormenta haya empujado al banco de peces hasta la arena. Mientras tanto, los vecinos se enfrentan a la tarea de limpiar las 20 toneladas de peces muertos antes de que el arenal se convierta en un basurero putrefacto.

«La gente de la zona dice que algo parecido sucedió en los años 80. Tal vez, estos peces estuvieron atrapados en un entorno sin oxígeno y luego fallecieron por el agua dulce», explica Jan-Petter Jorgensen, de 44 años, que descubrió los peces varados cuando paseaba con su perro.

De acuerdo a los expertos, existen diversas teorías sobre este hallazgo. Unos creen que lo peces fueron atrapados por la marea cuando huían de depredadores. Otros consideran que los peces fueron arrojados a la costa tras una tormenta o se quedaron atrapados en las corrientes. Jens Christian Holst, miembro del Instituto de Investigación Marina, ha explicado que analizarán los peces para saber si han muerto a causa de una enfermedad.

Segunda señal apocalíptica
Para los aficionados a las profecías más disparatadas, los peces muertos suponen una segunda señal apocalíptica del fin del mundo, un asunto de actualidad al ser 2012, según algunas interpretaciones que los arqueólogos consideran una falacia, el año señalado por el calendario maya como el del fin de los tiempos. La segunda señal, porque la primera se ha producido en Arkansas (EE.UU.). Miles de mirlos negros se han precipitado contra el suelo sin explicación aparente en la pequeña localidad de Beebe horas antes del comienzo del año. Esta muerte masiva de pájaros ya sucedió el año pasado, en el mismo lugar y justo en las mismas fechas. En este caso, los ornitólogos también buscan una explicación convincente que aclare lo sucedido, lejos de profecías descabelladas.